jueves, 18 de junio de 2009

Así se toma una cerveza


Por Facundo Garnica

"De porrón en porrón", te propone ciertos consejos para la correcta desgustación y servicio de esta refrescante y tan popular bebida.

Queda claro que a la hora de elegir una bebida aperitiva, la cerveza se lleva el primer lugar, pero a la hora de servirla y tomarla ¿Se realiza correctamente? ¿Da lo mismo cualquier vaso? ¿A que temperatura debe estar?. A continuación te ofrecemos distintas pautas para que la disfrutes como adecuadamente.

En primer lugar, la cerveza se ha de servir en un recipiente frío pero nunca congelado, ya que esto no favorece la creación de espuma ni su apreciación visual.

En segunda instancia, se recomienda utilizar un cristal transparente y fino, para que se pueda apreciar el color y resulte más agradable su entrada en boca.

Continuando con las características del recipiente, este debe ser una copa o jarra para poder agarrarlo por el pie o asa (según el caso) y no calentar así la bebida con la mano.

En cuanto a la temperatura, se recomienda servir a unos 5º si es lager (el tipo de cerveza más consumido) o a 10º si se trata de una cerveza negra.

Por otra parte, a la hora de tirarla (ya sea desde un barril, una lata o una botella) se deberá situar el recipiente a una distancia suficiente para que, al caer, la cerveza se bata suavemente con el fondo y se llene de líquido y espuma. Esta última se forma durante el ‘tiraje’ y se controla inclinando el vaso: primero 45º y después poniéndolo en posición vertical.

Para finalizar, la consistencia de la espuma es de suma importancia (tan malo es el exceso como el defecto). Así, se aconseja que la ‘corona de espuma’ mida unos 2 cm en el vaso.

Ahora es momento de plasmarlo en la práctica y disfrutar de un buen vas de cerveza.

¡Salud!



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